Uno de mis libros favoritos de inversión ha sido 100-Baggers, de Christopher Mayer, ya que aborda la inversión de una forma muy parecida a la filosofía de inversión que he ido construyendo estos años y me ayudó a terminar de aterrizar todas las ideas que tenía en mi mente durante este proceso.
Y bueno, que mejor forma para traer un resumen del libro que ahora que estamos hablando de Buscar Baggers. De hecho, pienso que este libro es la cumbre de esta idea, ya que usa las lecciones de numerosos estudios previos y los sintetiza en un solo libro, así que no hay mejor forma de cerrar esta serie que compartiendo los aspectos más importantes que encontró Chris Mayer.
Como mencionamos en la primera parte, el término '10-bagger' fue utilizado y popularizado por primera vez por el gran Peter Lynch para describir acciones que multiplicaron su valor por diez veces. Christopher Mayer, gerente de cartera y cofundador de Woodlock House Family Capital, dio un paso más allá y escribió su libro para hablar sobre las 100-BAGGERS, es decir, empresas que devolvieron 100 dólares por cada dólar invertido.
Christopher decidió estudiar a las 100-baggers que se desarrollaron entre los años de 1962 y 2014, con un resultado de 365 empresas para estudiar. Esta investigación estuvo basada en un estudio similar realizado por Thomas Phelps anteriormente, en su libro “100 to 1 in the Stock Market”. Coincidentemente, Phelps también descubrió el mismo número de 100 baggers entre 1932 y 1971 (365 empresas).
Libro 100-Baggers
Ahora sí viene lo interesante: ¿Qué se necesita para tener retornos de 100 dólares por cada dólar invertido?
Si bien es evidente que la respuesta no es fácil y que no hay una fórmula mágica para el éxito, sí hay algunas características que se pueden encontrar en las empresas que ha realizado la hazaña de multiplicarse por 100. También hay ciertas cosas psicológicas que se deben tener en mente para poder beneficiarse de estos retornos, lo cual hace este estudio aún más interesante.
Para este caso haré un resumen más corto del libro, ya que varios de los aspectos mencionados ya han sido tocados extensamente en las anteriores partes de esta serie. Entonces, una forma de resumir Buscando Baggers es con los siguientes principios:
Crecimiento, Crecimiento y Más Crecimiento
Como vimos a lo largo de las tres partes de Buscando Baggers, el crecimiento es un principio escencial y que no se puede negociar. Cada una de las 100-Baggers terminaron siendo una empresa más grande (en números de ventas) después de multiplicar su precio.
Pero debemos buscar crecimiento que añada valor, crecimiento “bueno”. Si una empresa consigue doblar sus ventas pero también lo hace su número de acciones, o lo hace bajando radicalmente los precios (y su ROIC), entonces no nos sirve. Hay que focalizarse en el crecimiento de las ventas y de los EPS, ya que hay numerosos ejemplos de empresas que en sus etapas de alto crecimiento crecían mucho en ventas pero no en EPS debido a la alta dilución de acciones.
Lo importante es medir el “earnings power” o el poder de crecimiento de los beneficios, que refleja la capacidad de una empresa para obtener retornos sobre el capital invertido por encima de la media con elevados ratios de crecimiento. Es una pista de la fortaleza competitiva a largo plazo.
Una forma visual de entender este concepto es viendo el crecimiento de los EPS y el precio de la acción, por ejemplo, con Apple. Podemos notar como la acción se suele mover al unísono de los EPS representados por la línea negra. A veces estará por encima (sobrevalorada), a veces estará por debajo (infravalorada), pero en el largo plazo la única forma de que se mueva el precio de la acción es si los beneficios por acción lo hacen también.
Multiplos Bajos de Preferencia
No se puede esperar un rendimiento excepcional pagando múltiplos elevados. Por ejemplo, si pagamos un PER 50 por una empresa que genera $1 dólar de beneficio por acción, necesitaríamos que se mantenga el PER y que ese dólar de multiplique por 100 veces. Pero si en algún momento el PER pasa de 50 a 25, necesitaríamos que los beneficios se multipliquen 200 veces para tener el mismo retorno.
Se podría resumir esta idea como: No pagar multiplos exagerados, pero tampoco buscar entre empresas con PER 4, ya que las probabilidades de encontrar un negocio de calidad a esa valoración son muy bajas. Como todo en la vida, se necesita un balance.
Y si logras encontrar los dos aspectos anteriores juntos (alto crecimiento y una valoración baja), tienes lo que Chris Mayer llama “el bimotor de una 100-Bagger”, que sería la mejor forma de potenciar tus rendimientos.
Fosos Económicos
Un moat permite a una compañía obtener un alto retorno de capital a lo largo del tiempo. Y aunque hay que dedicar tiempo para identificar y analizar el moat de una compañía, ya que es un aspecto subjetivo que no se puede identificar a primera vista sin entender el modelo de negocios, termina siendo un aspecto clave para una buena inversión.
Una empresa puede ser 100-Bagger como consecuencia del descubrimiento de un yacimiento petrolero o de un nuevo medicamento, pero estos hechos son prácticamente imposibles de anticipar por un inversor promedio. En cambio, si que se puede observar los altos retornos de capital y la capacidad de reinversión en el tiempo para prever un crecimiento sostenible para los próximos años.
Empresas Pequeñas de Preferencia
Apple tiene un Market Cap que en caso de multiplicarse por 100, cuadruplicaría el tamaño de la economía USA. Obviamente esto es una suposición imposible, por lo que para buscar una 100-Bagger la recomendación es indagar en empresas pequeñas.
Esto no es una norma y también se puede lograr retornos excepcionales en empresas de mayor tamaño. Como una sugerencia, Mayer indica que se puede buscar empresas a partir de $170M de Market Cap, es decir, tampoco hace falta comprar Nano Caps de $20M para tener buenos retornos.
Fundadores con Skin in the Game
Muchos grandes negocios de los últimos años tienen detrás la figura de un “owner-operator” o un operador que es dueño y fundador de la empresa (Buffett, Bezos, Steve Jobs, Zuckerberg, etc …).
Invertir en una empresa con un gran “owner-operator”, que está presente en las decisiones del dia a dia, con skin in the game o una alta posesión de acciones de su negocio, aumenta la convicción del inversor y hace que sea más sencillo mantener la empresa durante los momentos complicados.
Necesitas Tiempo
La mayoría de las empresas estudiadas tardan de 20 a 25 años en convertirse en 100-Bagger y hay que aprender a tener paciencia, saber esperar, como hacían los pioneros americanos con el Coffee-Can.
Si creamos un portfolio adecuadamente y lo mantenemos 10 años, esta teoría dice que en esa fecha al menos habrá un stock con grandes ganancias. Y siempre tendremos mejor resultado que habiendo comprado y vendido sin parar durante este tiempo.
Necesitas un Buen Filtro
Hay que aislarse de las noticias que aparecen en las noticias, en Twitter y en los medios financieros. Los movimientos del precio de una acción pueden ser grandes, pero ello no nos debe llevar a comprar o vender demasiado rápido. En todas las 100-Baggers hubo momentos de rallys alcistas y drag downs agresivos, pero lo mejor en todos los casos fue aislarse del ruido y no hacer nada (ni comprar ni vender).
Otro punto clave es no prestar tanta atención a los índices bursátiles, porque estos permiten tener una visión general del comportamiento del mercado, pero no nos dan pistas en la búsqueda de un 100-bagger. Por ejemplo, en el periodo de 1966 a 1982 el Dow Jones hizo un gran movimiento lateral sin apenas ningún incremento. Sin embargo en este periodo se produjeron 187 oportunidades de compra de stocks que se convirtieron en 100-Bagger.
Resistencia a Vender
Una vez compremos una buena empresa, teniendo plena convicción en ella, debemos mantenerla y dejar que el interés compuesto haga su trabajo.
Phelps, autor del libro “100 to 1 in the Stock Market” da algunas razones sobre cuándo vender acciones, en caso de tener que hacerlo:
– Hemos cometido un error: Ha cambiado significativamente el background de la empresa.
– La acción ya no cumple con nuestro criterio de inversión.
– Queremos cambiar para adquirir una empresa mejor (con muchas precauciones antes de hacerlo).
Phelps también nos dice que no vendamos por razones ajenas a los criterios de inversión :
– El precio es muy alto.
– Obtener ganancias para compensar otras perdidas a efectos fiscales.
– El precio del stock no se mueve cuando otros si lo hacen.
– Cuando se produce un Stop Loss.
Conclusiones
Después de analizar estos tres estudios sobre empresas baggers, me doy cuenta de que si bien no es algo sencillo de lograr, los tres análisis coincidieron en algunos puntos en común que pueden servir de referencia para buscar estas inversiones extraordinarias.
Los tres que más se mencionaron y que más se quedaron en mi mente son:
Un tamaño pequeño que favoresca el crecimiento.
Una valoración barata que impulse el precio de la acción a futuro.
La paciencia para mantener la inversión durante el tiempo que sea necesario hasta que se convierta en una bagger.
Estos tres aspectos serán pilares en mis futuras búsqueda de nuevas inversiones y como se puede observar, no se requiere de fórmulas complejas o conocimientos y habilidades superiores al inversor promedio para lograr esto. Solo hace falta “pescar donde están los peces” y tener la mentalidad adecuada, y considero que esto está al alcance de todos.
Cuéntame qué te pareció esta serie y cuál fue tu estudio favorito. Estaré leyendo los comentarios y ya saben que todas las opiniones son bienvenidas!
Disclaimer
Todos los contenidos de este blog son solo para fines informativos y en ningún caso, ya sea expreso o implícito, se considerarán consejos de inversión, legales o de cualquier otra naturaleza. Haga su propia investigación y diligencia debida.
Buen resumen, de algo más complejo. Carecemos de paciencia.. Gracias
Muy bueno tu resumen 👍🏼 saludos !